La canción comienza con varios riffs entrecruzados que continuan acompañando las estrofas con la voz de Grohl doblada por la de su batería Taylor Hawkins. El estribillo tiene esa parte más melódica que siempre ha acompañado a la banda desde sus comienzos y que hace una mezcla tan explosiva con la intensidad que caracteriza a sus composiciones. Antes del último estribillo el tema tiene una parte instrumental prueba de dicha intensidad. Sin duda una gran canción. Seguro que el resto del disco está lleno de ellas.
El videoclip no es nada del otro mundo, aunque las figuras de los músicos recortadas sobre los espacios blancos y de colores de ese cubo musical, tienen su aquel. Más currado eso sí, que el video que sacaron hace unas semanas,White Limo, que parecía más una broma junto con su colega Lemmy Kilmister de Motorhead y que también estará en el nuevo album de los Foo Fighters. En este caso hablamos de un tema muy cañero, con las voces de Dave Grohl desgarradas al máximo.
Como curiosidad, mencionar que este album supone el regreso de Pat Smear, que ya estuvo en las primeras formaciones de la banda, en la última gira de la misma y que además coincidió con Grohl durante el último año de Nirvana.
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