¿Has oído hablar alguna vez del “Black N’ Roll”? Es un término acuñado para definir el estilo que, principalmente, viene representando la banda noruega Kvelertak, conjunto que acaba de publicar muy recientemente su cuarto LP, «Splid» (2020). Aprovechando la ocasión, vamos a conocer una propuesta más que interesante. ¡Empecemos!
Mjød – Kvelertak (2011): primer éxito de los de Stavenger, por el cual podrás comprobar que, efectivamente, su vocalista canta en noruego, lo cual no les ha impedido amasar un muy buen número de seguidores.
Blodtørst – Kvelertak (2011): composiciones de rock n’ roll sostenidas por un sonido muy metalero y una actitud muy punk. Además, se caracterizan por usar guitarras acústicas en ciertos pasajes de sus canciones (y las cuales encajan a la perfección).
Sjøhyenar (Havets Herrer) – Kvelertak (2011): el estilo vocal de su entonces cantante, Erlend Hjelvik, fusiona estilos de canto de hardcore y black metal, resultando en una fusión “gutural” curiosa.
Bruane Brenn – Meir (2013): un gran ejemplo de que los coros son un elemento muy importante dentro de las composiciones de la banda.
Kvelertak – Meir (2013): otro de los rasgos más notables de este grupo son sus característicos punteos melódicos, con un sonido y estilo muy personal.
1985 – Nattesferd (2016): a partir de este álbum, Kvelertak empezaron a tornar hacia un sonido que recuerda más a rock clásico, al estilo de lo que caracteriza a sus vecinos escandinavos “The Hellacopters”.
Svartmesse – Nattesferd (2016): sin embargo, esos guturales tan característicos de la banda siguen sonando a pura energía hardcore bañada en matices de black metal.
Heksebrann – Nattesderd (2016): por otro lado, es en este disco donde empezaría a asomar la faceta más experimental de la banda, con composiciones que casi llegan a los 10 minutos de duración como es este caso.
Bråtebrann – Splid (2020): Este nuevo álbum supone la entrada al grupo de Ivar Nikolaisen, quien viene a reemplazar a Erlend Hjelvik tras su marcha del grupo en 2019. No obstante, la esencia del grupo se mantiene intacta, a la vez que se ahondan cada vez más en sus facetas más experimentales.
Crack of Doom – Splid (2020): y es que, además de ser el álbum más heterogéneo de la banda, también supone la aparición de sus primeros versos en inglés, para lo cual se valen además de la colaboración de Troy Sanders, bajista y cantante de Mastodon https://open.spotify.com/artist/1Dvfqq39HxvCJ3GvfeIFuT.
Entrada realizada por Dani Jiménez, Monitor de Rock Camp.