Hace unos días volví a escuchar y a disfrutar uno de los discos más denostados de Metallica, el ya clásico Load (1996). Este disco supuso un antes y un después en la banda americana y para mi fue el primer CD que me compré con mi propio dinero, así que el vínculo con esta disco es muy especial.
Pongamos en situación rápidamente. La banda estaba en su momento álgido, tras el mega éxito del «Black Album» (1991). De hecho estaban en un punto que tenían claro que podían hacer lo que les diese la gana (y tanto que lo hicieron). Si con su anterior trabajo habían roto con el Thrash Metal llevando su estilo a un Metal abierto a todos los públicos, ahora dieron rienda suelta a su creatividad creando un disco en el que el Metal se mezclaba con el Rock Alternativo, el Blues o incluso con el Country o el Jazz. Una locura que para muchos supuso una traición, pero que para Metallica era un paso más en su evolución como banda. Siempre habían hecho lo que les habían querido y lo han seguido haciendo hasta la actualidad. También es importante destacar el cambio en las letras de las canciones en las que James Hetfield vuelca todos sus fantasmas internos y las hace mucho más personales, frente a la temática social más característica de sus anteriores trabajos.
Además de los cambios en el sonido, el disco llegó acompañado de un cambio estético, que aunque a día de hoy suena absurdo, para muchos fue la gran traición, casi peor que los cambios musicales. Los 4 miembros de Metallica se cortaron la melena. ¡Oh, pecado! Y eso los fans más radicales no lo vieron con buenos ojos. Incluso se atrevieron salir con una imagen cuidada hasta el punto de maquillarse como en el caso de Kirk Hammet y eso ya era demasiado. Alguno se rasgaba las vestiduras.
Pero dejémonos de tonterías y vamos a analizar la música. Y es que Load supuso un cambio pero no tan radical. Fue una evolución lógica del Black Album, en la que la banda en vez de pensar en llegar a todo el mundo se miró un poco al ombligo pero sin perder esa calidad que siempre les ha caracterizado.
El disco arranca con un pepinazo como «Ain’t My Bitch», seguida por «2×4» y «The House That Jack Built». Tres temas que muestran claramente ese evolución de los sonidos del Black Album al Rock Alternativo. Si la primera es pura intensidad y la segunda recupera la pegada de los temas pesados de su anterior trabajo, la tercera juguetea con los sonidos más alternativos recordando mucho a Alice In Chains. El cuarto tema «Until It Sleeps» fue elegido como primer single y el shock fue importante porque ese aire noventero cercano al grunge impactó muchísimo sin dejar de sonar a Metallica, pero a unos nuevos Metallica. Además lo acompañaron de un magnífico vídeo que se basaba en las pinturas de El Bosco. Para mi es uno de sus éxitos en esta etapa. «King Of Nothing» es otro temazo que podría haber estado perfectamente en su anterior trabajo y que en directo suena siempre brutal. Podría decir que es el hermano pequeño de «Enter Sandman».
Por ahora diréis, bueno ni tan mal. Pero es que el sexto tema ya fue demasiado. «Hero Of The Day» es un tema con una melodía bastante popera que comienza casi como un tema acústico que va evolucionando en intensidad y ganándote según pasan los segundos. Demasiado cambio para algunos, pero ver a Metallica en estos jardines sigue siendo muy interesante. Reconozco que en su día a mi también me costó pero a día de hoy me gusta.
La segunda parte del disco es la que puede ser más complicada.«Bleeding Me» muestra ese lado más experimental pero con un raíz Blues. Es un tema de más de 8 minutos que a muchos se les hace largo, pero que a mi modo de ver son magníficos y necesarios. Tras este tema llega la que sí que puede ser una travesía del desierto dentro de un disco con 14 canciones. Y es que «Cure» y «Poor Twisted Me» probablemente sean dos de los temas más flojos del álbum. El primero de ellos parece un descarte del Black Album y el segundo es un tema sin mucho que sacarle que aún durando 4 minutos se hace largo.
La monotonía desaparece con «Wasting My Hate» un gran tema intenso, probablemente el que rescate los sonidos más cañeros de la banda dentro de este álbum tan experimental. Y de nuevo Metallica nos vuelve a impactar con el siguiente tema «Mama Said» es una balada country. Así como lo leéis. Pero una balada muy triste en la que James Hetfield muestra su lado más íntimo y no habla de su madre fallecida cuando el solo tenía 15 años.
«Thorn Within» retoma el sonido con aires alternativos sin aportar mucho más y «Ronnie» es un tema extraño con un sonido boogie y un Hetfield cantando, hablando casi rapeando. Quizás es la que menos me encaje de todo el disco. Pero amigos estos dos temas son la antesala de la joya oculta de este disco «The Outlaw Thorn» una canción épica de casi 10 minutos que llegaba a los 11 pero que tuvo que acortarse para poder meterla dentro de un disco que ya superaba los 80 minutos. Pero es que son 10 minutos de gloria, que en su versión en directo con orquesta sinfónica en el «S&M» gana en grandilocuencia. Sin duda un tema que Metallica tendría que poner en valor porque es una de sus composiciones más completas.
Como conclusión, decir que Load (1996) es un álbum que en su día impacto pero al que el tiempo le ha sentado muy bien. Reconozco que en mi caso lo veo con el prisma de alguien que lo disfrutó en plena adolescencia y tuvo posters en las paredes de su habitación en incluso camisetas con ese nuevo logo que usaron para esta etapa de la banda. Así que aunque he intentado verlo desde un punto de vista objetivo y con la perspectiva que me da hacer un análisis en 2019, se me notará que es un disco que me gusta mucho.
Solo espero que después de leer este extenso análisis os hayan entrado ganas de volver a escucharlo o descubrirlo por primera vez.
Entrada realizada por Javi Miralles, Coordinador de Rock Camp.
Buen día Javi, un cordial saludo! Buena reseña del disco.Recuerdo que tenía 15 años cuando Metallica sacó «Load», previamente ya había escuchado todos los discos de ellos, lo primero que pensé al ver la caratula fue de sentir que tenía en mis manos un CD que no pertenecía a los de California, y cuando lo escuché por primera vez, me sorprendieron, extrañaba obviamente los anteriores Metallica, pero, lo reconozco, me gustó el arriesgado y orgulloso paso que dieron. En conclusión, me trae buenos recuerdos ese álbum. Un abrazo!
Muchas gracias, Víctor. La verdad es que fue un shock para todos. Pero al final sigue siendo un gran disco.