El viernes pasado pudimos asistir al regreso a Valladolid del gran Ángel Stanich para presentar su nuevo trabajo Antigua y Barbuda (2017). A algo más de las 21:00 llegábamos unos cuantos monitores y ex-monitores de Rock Camp al recinto del concierto, el LAVA, siglas del Laboratorio de las Artes de Valladolid.

Arrancaba con el concierto José Carreño con su nueva banda, mítico músico y promotor de la escena Vallisoletana que hasta ahora había mantenido el formato acústico y venía a presentar sus canciones en directo esta vez con banda eléctrica, y rodeado de los mejores instrumentistas de los que puede rodearse uno en esta ciudad.
Con un sonido compacto escuchamos sus nuevas canciones, con colaboraciones puntuales como la de Guille Aragón de Arizona Baby  a las percusiones.
Sin duda fue un inicio ideal para una noche en la que se respiraba la amistad entre las bandas y el público local, esperamos escuchar pronto alguna grabación de José Carreño y tener noticias de nuevos directos.

Tras el cambio de escenario llegaba el plato fuerte de la noche, Angel Stanich con su banda. Hijo pródigo (adoptivo) de Valladolid, cántabro de nacimiento, volvía a la ciudad que le vio emerger como artista a rodearse de una buena cantidad de público y sobre todo un montón de amigos con ganas de ver su Antigua y Barbuda (2017) en directo.

Empezaron sonando temas como “Cosecha” o “Mas se perdió en Cuba” con un sonido excelente, a cargo del gran Javi Nieto, responsable de la grabación de su exitoso Camino Ácido (2014) y que ahora les acompaña en directo (que se note que barro para casa y también me acuerdo del técnico). Los temas se fueron sucediendo hasta que comenzaron a salir los grandes hits de su primer disco, entre menciones a lugares de Valladolid donde ya hace años algunos pudimos descubrirlos.

La comunión con el público era total, Ángel jugaba en casa, pero es que además de eso demuestra que se ha consolidado con su banda y dominan a la perfección el directo que llevan por toda España, sala a sala, cada fin de semana.

Uno de los momentos más bonitos fue cuando para un primer bis Stanich reaparecía en el escenario con los tres Arizona Baby: Javier Vielba, Rubén Marrón y Guille Aragón, que casi fueron su banda original y hacían ese pelotazo que es “Mezcalito” en un acto de hermanamiento en el que todos bailamos como locos.

Tras esto el concierto tocaba a su fin, volvía la Stanich Band actual y soltaban la última descarga de canciones terminando con “Mátame Camión” que puso a ritmo de bajo con fuzz la sala patas arriba en una noche para recordar.

Ángel Stanich no defrauda, y como amigos y fans que somos en Rock Camp nos alegramos tremendamente por él y siempre recordamos aquel mítico concierto que nos ofreció en el escenario del comedor en 2011.

Entrada realizada por Pablo Giral, Monitor de Rock Camp.