¡Hola, rockcampers!
El pasádo miércoles 8 de noviembre tuvimos el placer de acudir a una de nuestras citas más esperadas del año, el concierto de Larkin Poe en la sala Riviera de Madrid. Así que nos pasamos por aquí para contarte cómo vivimos el concierto desde el público.
En primer lugar, para contextualizaros, Larkin Poe es una banda que llevamos siguiendo un tiempo y de la que ya os hemos hablado en esta entrada, desde que fuimos a su primer concierto en Madrid en 2018. Entonces pudimos disfrutar de su debut en España en una sala Cool Stage no tan llena como merecían. Cinco años después parece que las cosas están yendo genial para Larkin Poe: todos sus últimos álbumes de estudio llegaron al número 1 en las listas de álbumes de blues de Billboard. Y no es sorprendente que las hermanas Rebecca y Megan Lovell tengan ahora una nominación al Grammy en el bolsillo. Desde principios de octubre hasta principios de noviembre de 2023, Larkin Poe ha estado tocando en salas cada vez más grandes por toda Europa para presentar su último álbum ‘Blood Harmony’. Con fechas en Barcelona y Madrid, hemos tenido la suerte de volver a verlas en directo por tercera vez, en este caso en la sala Riviera. El lugar estaba a tope, y nos encanta ver como año tras año consiguen llenar espacios más grandes.
Los primeros en salir al escenario fueron sus teloneros, The Sheepdogs.
The Sheepdogs subieron al escenario puntualmente a las 19:45h y, en un abrir y cerrar de ojos, nos transportaron unos buenos 50 años atrás. Esta exitosa banda de rock canadiense no solo mantiene un estilo visual retro, sino que parece haber salido directamente de otra época. Musicalmente, el quinteto se inspira mucho en bandas veteranas como Allman Brothers Band, Creedence Clearwater Revival, etc. Desde la primera nota, los canadienses se sintieron como en casa y nos regalaron una actuación impecable durante los 45 minutos de su espectáculo. Nos dejaron como sello característico sus solos armonizados a dos guitarras, que impriman su personalidad en la mayoría de sus temas.
Después de la pausa habitual entre el telonero y el plato fuerte, empieza la presentación de Larkin Poe. Las hermanas Rebecca y Megan Lovell están en el escenario acompañadas por el bajista Tarke Layman y el baterista Ben Satterlee. Vestidos de blanco de pies a cabeza, los chicos ocupan su sitio al fondo mientras las líderes del proyecto se plantan en la parte delantera del escenario. La banda arranca con ‘Strike Gold’, ‘Kick The Blues’ y ‘Summertime Sunset’, ¡tres temazos directos de su último álbum ‘Blood Harmony’! En general, el álbum actual se lleva la atención merecida, con ocho canciones en un setlist de 18.
Después de que las hermanas nos encandilaran a todos con un increíble recorrido de su discografía, tirando hacia la mitad del concierto los cuatro músicos se reúnen en un pequeño círculo en la parte delantera del escenario. El bajista Tarke Layman ha cambiado al contrabajo y el baterista Ben Satterlee se coloca con un solo tambor. La cantante, Rebecca, nos explica que así solían presentarse como una banda de bluegrass en su tierra natal. Y entonces, los cuatro músicos rodeando el único micrófono del escenario, nos traen un formato bluegrass acustico que nos mantiene a todo el publico en un silencio absoluto para no perdernos ningun detalle. Por si todavía faltaban pruebas de que son las reinas del blues, esto ya nos termina de convencer. ¡La energía en el ambiente es pura magia!
El formato acústico continúa hasta que en mitad de un tema los miembros de la banda vuelven a sus instrumentos eléctricos e introducen gradualmente el final.En general, tanto Larkin Poe como The Sheepdogs dieron un concierto increíblemente disfrutón una actuación con poco que criticar. ¡Fue una noche para recordar!
Además nos encanta ver como tanto el público como el equipo que llevan, así como todo el diseño de escenario van creciendo cada año. Esperamos que esta ola no se pare nunca y que sigan creciendo para llegar a ser una de las grandes bandas del panorama internacional.
Entrada realizada por Marc Moreno, monitor y fotógrafo de Rock Camp.