Hoy nos sacamos de la manga una nueva sección que seguro que os gusta. De vez en cuando hablaremos de algunas de las portadas de discos más importantes de la Historia del Rock. Para empezar lo hacemos con una de las más icónicas, la del Dark Side Of The Moon de Pink Floyd.

El diseño corrió a cargo del grupo artístico Hipgnosis que ya había trabajado anteriormente con Pink Floyd. La banda tenía claro que no querían salir en la portada y querían romper también con los anteriores diseños basados en fotografías de uno de los miembros del grupo, Storm Thorgerson. Richard Wright, teclista de la banda, les pidió algo novedoso y elegante. Presentaron varias propuestas y la banda se decantó claramente por el mítico prisma de luz. El espectro de luz continua en la contraportada para llegar a otro prisma y volver a descomponerse. El interior de la carpeta sigue ese diseño con los colores atravesando las letras del disco y un latido del corazón superpuesto sobre ellos (al igual que el latido siempre está presente en el sonido de todo el disco). Como curiosidad, el color añil desaparece , por lo que si os fijáis no aparecen los clásicos siete colores.

En palabras del propio Thorgerson: “el diseño de la funda se basa en tres ingredientes. Uno de ellos es el espectáculo de luz de la banda que yo quería representar, el segundo hace alusión a un texto sobre ambición y codicia y el tercero era que Rick (Richard Wright) quería una funda sencilla atrevida y llamativa. Cuando les presenté las cuatro propuestas, no pasó mucho tiempo para que se decidan por el Prisma. Fue inmediato. En realidad, ahora no me imagino el disco sin esa imagen”.

Y así tenemos una de las portadas más míticas de la Historia del Rock.

Entrada realizada por Javi Miralles, Coordinador de Rock Camp