Hace unos días Abarca y un servidor pudimos disfrutar de uno de los acontecimientos metaleros del año. Incluso podría decir que de las últimas décadas. Estamos hablando de la gira Pumpkins United de Helloween.
A lo largo de las últimas semanas ya os he ido poniendo en situación con las entradas dedicadas a 10 temas para conocer a Helloween y al 30 aniversario del disco Keeper Of The Seven Keys Part 1. Así que no os cuento más detalles de esta reunión, ya que podéis leerlos en ellas.
Llegamos al concierto cuando estaban sonando las primeras notas de «Halloween». Un temazo de más de 13 minutos para abrir un concierto. Ahí dejaban claro que este setlist estaba dedicado a los fans de la banda. Andi Deris y Michael Kiske se iban intercalando a lo largo de la canción algo que ocurrió también en el siguiente tema «Dr Stein» que hizo que el público se volviese loco. El resto del concierto alternó momentos con uno u otro en solitario repasando temas de sus etapas como cantantes. Además, mediado el concierto, llegó el momento de Kai Hansen que a parte de guitarrista y compositor fue el cantante en los primeros años de la banda (y luego siguió siéndolo en su proyecto Gamma Ray del que hablaremos en su día) y cantó una mezcla de tres temas: «Starlight», «Ride The Sky» y «Judas», más el añadido del «Heavy Metal Is The Law».
Con Michael Kiske estamos hablando de una de las voces más privilegiadas de la Historia del Rock y a pesar de los miedos que teníamos por una reciente gripe que ha pasado en la gira sudamericana, cumplió con creces. Escuchar «I’m Alive», «Eagle Fly Free», «A Little Time» o «Future World» con su voz original, pone piel de gallina a cualquiera. Por otro lado Andi Deris demostró que también es un privilegiado. De hecho en muchos momentos fue sorprendente como ayudó a Kiske en los temas compartidos y ojito al dato porque los temas que cantó junto a él los hizo en el tono original, algo que cuando los canta él solo no pasa ya que los bajan medio tono. Además Deris como showman es genial y el hecho de hablar castellano y que sea un tío tan simpático hizo que se erigiese como el representante de la banda. Sus mejores momentos llegaron con «I Can» y «Power» que revolucionaron el concierto, pero también con «Perfect Gentleman» o «Forever And One (Neverland)» que compartió en su parte final con Michael.
El resto del grupo estuvo muy bien también. Ver a Hansen con Helloween es otro sueño cumplido. De hecho, por la respuesta del público creo que era el más deseado. Weikath aportó su clase a la guitarra y Sacha ayudó perfectamente a estos dos genios. Al bajo Marcus estuvo divertido y solvente como tiene que ser y Dani Löble a la batería estuvo olímpico (darle al doble bombo durante 3 horas creo que merece esa calificación). Además hubo un bonito homenaje al fallecido Ingo Schwichtenberg en el que Dani tocó junto a un vídeo de este último un solo de batería.
El show en sí no escatimó en nada ya que además estaba siendo grabado para su publicación en DVD. Tres pantallas gigantes ilustraron todo el evento. El escenario grande que además tenía un set de batería especial con la forma de dos calabazas que protagonizaron los vídeos entre canciones. En uno de los bises nos deleitaron con el tema «Keeper Of The Seven Keys» que se alargó a los 20 minutos y nos dejó a todos alucinados. ¡Qué maravilla! Para terminar, grandes globos naranjas y negros en el último tema que obviamente fue «I Want Out». La única pega fue el volumen atronador que enmarañó el sonido aunque como siempre dependía mucho de donde estuvieses ubicado en un Wizink Center con unas 14000 personas entregadas el metal.
En definitiva, un concierto histórico que va a ser difícil de olvidar. Una banda legendaria, que ha influido a otras muchas y que demuestra que sigue en plena forma. Solo nos queda cruzar los dedos y esperar que esta super formación continue y nos regale un disco conjunto como parece que se está rumoreando.
Aún seguimos cantando «Happy happy Helloween, Helloween, Helloween…»
Entrada realizada por Javi Miralles, Coordinador de Rock Camp.